CLASES particulares de guitarra

Práctica regular

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El aprendizaje de un instrumento musical no es una tarea insuperable; la clave radica en la regularidad.

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Basándome en mi experiencia personal y en muchos años de enseñanza, puedo afirmar con certeza que la constancia es la clave del éxito. Un compromiso diario, incluso de corta duración, le permitirá progresar de manera rápida, significativa y, sobre todo, constante. Esto lo colocará en el camino de una mejora continua.

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Los principiantes pueden comenzar con solo 10 a 20 minutos al día, mientras que los músicos más avanzados deberían dedicar aproximadamente 40 minutos a su práctica para obtener resultados positivos.

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Aprendizaje progresivo

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Es fundamental que el estudiante cultive rápidamente un amor por la música y su instrumento, y esa es mi principal misión.

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En cada lección, el estudiante observa su progresión, adquiere nuevos conocimientos, domina rápidamente su pieza, descubre nuevos acordes, juegos de voces y técnicas, o incluso tiene éxito improvisando utilizando la armonía.

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Mi objetivo es hacer que el aprendizaje o perfeccionamiento del instrumento sea una experiencia agradable, a pesar del trabajo necesario.

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Con una práctica regular, los avances son muy reales y, sin importar cuáles sean sus expectativas, para algunos, esto podría incluso convertirse en una verdadera pasión o profesión, como fue mi caso.

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Estilos de música

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Es posible explorar cualquier estilo de música, pero me especializo en músicas sudamericanas y especialmente en la música argentina: el tango y el folklore en la guitarra y el charango.

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Gracias a mi enseñanza, adquirirás una base sólida para tocar cualquier estilo musical y, si estás interesado, un conocimiento profundo de los ritmos y el lenguaje de la música latinoamericana.

Solfeo y armonía

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El solfeo y la armonía, términos que pueden asustar a los principiantes, no deberían ser motivo de preocupación.

Las clases incluyen el aprendizaje simultáneo de:

• LECTURA Y SOLFEO: comprensión de las figuras de notas y ritmo, las medidas, el tempo, los signos de expresión.

• EDUCACIÓN AUDITIVA: reconocimiento de los intervalos entre las notas, los acordes, las tonalidades, ejercicios y dictados.

• ANÁLISIS MUSICAL: saber analizar una pieza y definir su estructura, su instrumentación, su época.

• HARMONÍA, COMPOSICIÓN Y ARREGLOS: comprender el lenguaje musical (modos, escalas, cadencias, funciones tonales, tríadas, transposiciones).

• CANTO, RITMO y ACOMPAÑAMIENTO (con la guitarra): aplicación lúdica de los conocimientos anteriores.

El solfeo en sí mismo no es indispensable, especialmente cuando tocas la guitarra con tablaturas. Se trata, ante todo, de un aprendizaje personal para comprender la correspondencia entre una nota y su posición en un pentagrama.